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Es ineludible darse cuenta de que hay incalculables maneras de percibir al dinero. Cada familia tiene un incomparable concepto de él.
Hay el dinero que se gana sufriendo, el dinero que se gana con goce, el dinero que se hereda. El dinero sucio, el dinero culpable, el dinero-Dios, el dinero frágil de los inmigrantes, el dinero desprestigiado por la doctrina católica, el dinero intolerante por la doctrina protestante, el dinero mendigado, el dinero ganado en el juego, etc,etc, etc.
Cada uno de esos dineros instituye en el individuo conductas y formas diferentes de comprender la vida.
El peor de todos los dineros es el dinero político, que nos ahoga día a día en el terror económico. Por beneficio de las ganancias industriales, que requieren hacernos consumir, el dinero ha ido sustituyendo a todos los valores espirituales. No se equivocó Quevedo cuando trazó “Poderoso caballero es don dinero”…
El terror de malgastar, de quedarnos sin nada, en cierta manera nos hace cautivos del dinero, y por aquello, al mismo tiempo que lo anhelamos más que nada, lo odiamos más que nada.
Para instituir una buena relación con él, correspondemos asimilar a amarlo, dándole una misión:
“Servirás esencialmente para que yo despliegue mi espíritu. Te conquistaré trabajando sólo en lo que me gusta. Finalizaré de solicitarte como si yo fuera un niño, y experimentaré a invertir, cuidando que lo que origino sea benéfico para mí, los otros, y nuestro planeta”.
Esto es lo esencial: Para poseer una buena correspondencia con el dinero, es justo tener una buena relación consigo mismo. Si te valorizas, el dinero disipa su fuerza implacable. Si te desvalorizas, el dinero se hace tu opresor.
Me ha convocado la curiosidad una y otra vez que los trabajadores de la luz o las personas que están en su viaje del alma por lo general suelen ser pobres.
Considera que tienen diversos problemas para conquistar dinero a sus vidas.
Perceptiblemente, no le sucede a todo el mundo, pero es un patrón que se halla forzosamente arraigado en curanderos, videntes, e inclusive en los trabajadores de la ascensión (y en todos los grupos que se interesan en los caminos espirituales).
Con esto pretendo señalar que obtendrás que trabajar con sus propios bloqueos personales que están estableciendo este problema en específico en tu vida. El ejercicio que vamos a hacer más adelante te va a admitir asemejar cuál es tu problema en particular, arreglarlo y sanarlo.
Posteriormente de asimilar este ejercicio, sería preciso que lo practicases una o dos veces al día, después de haber hecho tu meditación. Lo más importante sobre el dinero que necesitas entender, es que es un ser de energía, está vivo. Piensa en ello como un elemento muy fornido, un elemento muy transcendental.
Posiblemente es el elemento más importante en tu vida hoy. ¡Eso es debido a la naturaleza del mundo que estamos viviendo! Sobre todo si estás en un país occidental, donde es obligatorio tener dinero para sobrevivir.
El dinero te admite hacer las cosas más básicas, tales como beber agua fresca, tener un lugar donde vivir, tener ropa sobre tu cuerpo, ser capaz de expresarte de manera creativa. Comer todos los días. Las cosas más básicas de la vida comienzan a través de usar el dinero, por lo tanto, es considerablemente importante.
Otro semblante del dinero que me gustaría que pensaras es que el dinero no es malo. Algunas personas utilizan el dinero de una manera negativa, pero el dinero no tiene nada perjudicial en sí mismo. Una vez que equilibras y te conectas con la energía del dinero, lo verás por ti mismo. No hay definitivamente nada negativo sobre el dinero. Es inclusivo, creativo, enriquecedor. Es cálido, es hermoso. Y yo quiero que seas capaz de experimentar esto.
Fuente Reinaldo Dos Santos
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