Errores de Feng Shui

Errores, Feng Shui, energía, decoración

Los cinco elementos –agua, tierra, madera, fuego y metal– son necesarios para crear armonía y sensación de bienestar

El equilibrio entre el yin, la fuerza vinculada con la oscuridad y el frío, y el yang, relacionado con la luz y lo seco, es uno de los principios fundamentales del Feng Shui. Para lograr un balance se emplean recursos y acentos decorativos específicos. Acá, la experta Liliana Zúñiga ofrece algunos consejos para corregir el flujo de energía.

Bienvenida. “Donde hay iluminación, hay buen chi”, señala la asesora. Por eso, es importante cuidar que desde el ascensor o garaje y en el pasillo de entrada haya suficientes focos que aclaren la visual. “También se deben eliminar todos los rechinidos que hacen puertas y ventanas, pues son lúgubres”. Una alternativa es guindar campanillas en la manija, nunca en el dintel, “ya que la limpieza se anula al derramarse sobre la persona”.

Espejos. La función de estos accesorios, de acuerdo con esta antigua filosofía china, es multiplicar y expandir la energía. Por ende, “deben retirarse de los cuartos y moverse si están directamente detrás de la puerta principal, para que no reboten lo bueno que llega”.

Los mejores lugares para situarlos son en la sala-comedor –el centro de reunión de la familia–, y donde reflejen paisajes o ideas de abundancia. Igualmente, hay que tomar en cuenta el mobiliario con superficies muy pulidas.

Ángulos filosos. Otro de los errores comunes es no atender los ángulos que sobresalen en las habitaciones. “Estos se observan en las esquinas y en las uniones de paredes con vigas y columnas”. Si no se quiere alterar el diseño arquitectónico, una solución es redondear los cantos, o colocar plantas altas de hojas no puntiagudas. “Las lámparas de cristales facetados contrarrestan las ondas negativas”, señala Zúñiga.

Menos es más. El orden y la limpieza son esenciales en el Feng Shui, sobre todo en la cocina. “Hay que tratar de no acumular, guardar todo en los gabinetes, reparar botes de agua y mantener los electrodomésticos en perfecto estado”, dice la profesional. Para construir una dinámica, se recomienda distribuir triangularmente la nevera, cocina y el fregadero.

Si bien los puntos cardinales y coordenadas son claves, es conveniente respetar ciertos conceptos que compensan como: que los muebles más significativos estén apoyados en una pared y que no den la espalda –pues atrae las traiciones–. En los dormitorios, la cama no debe apuntar a la puerta ni el cabecero dar al baño o ventanas.

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