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La Astrología Mundana explica los grandes cambios sociopolíticos de la humanidad -depresiones económicas, guerras, revoluciones, inventos- desde una perspectiva cíclica, observando los movimientos de los planetas. Patricia Kesselman nos ayuda a interpretar la incertidumbre del momento presente, luego del triunfo de Trump en EE.UU.
Los sabios de la antigüedad consideraban que las conjunciones planetarias más importantes eran aquellas que se producían entre los planetas superiores: Marte, Júpiter y Saturno; entre ellas, la más importante es la de Júpiter con Saturno, por tratarse de los planetas visibles -a simple vista- más lentos. De acuerdo a los astrólogos magrebíes “Cada una de las figuras de estas conjunciones tiene una naturaleza, que da lugar a un juicio particular y una propiedad que la distingue de las demás. La de Júpiter con Saturno es el traspaso del poder de un pueblo al otro, cambios en las religiones y en las naciones”.
Las conjunciones de estos dos planetas forman, a su vez, un ciclo de conjunciones. Su ciclo combinado influye sobre períodos muy largos, de aproximadamente 240 años en el mismo elemento.
Tenemos que saber que cada ciclo completo de Júpiter con Saturno genera un milenio de 960 años divididos en 4 períodos de 240 años (no exactos, puede haber oscilación) que responden al siguiente orden: Fuego, Tierra, Aire, Agua.
La última conjunción de Saturno con Júpiter (que se produjo en el año 2000 en el grado 22º 42’ del Signo de Tauro) será también la última en un signo de Tierra. Aquí se produce un giro. En el año 2020 entrará de lleno en el ciclo de Aire (con Acuario) hasta 2199.
Finaliza, por lo tanto, un ciclo en un elemento y analógicamente, deberá finalizar aquello que representa.
* Lo que está concluyendo:
Los signos de Tierra están relacionados con lo concreto, lo práctico, material, tangible, los bienes, la productividad, la economía, la propiedad.
* Lo que está comenzando:
Los signos de Aire son humanos, sociales, de asociación e intercambio, de comunicaciones, ciencias, artes y relaciones.
El chico malo al poder
Donald Trump, aparece en escena en el país más capitalista del mundo en un momento crítico y de cambio para la humanidad.
El Presidente electo de los EE.UU. ha nacido con Ascendente en conjunción a “Regulus”, la estrella más brillante de la constelación de Leo llamada el “pequeño rey” y una de las cuatro estrellas reales de los Persas y en el Medio Cielo de la carta. A esto le sumamos otra importante estrella: “la cabeza de la Medusa”, también llamada “Caput Algol”, cuyo nombre proviene del árabe “Al Ghoul”, “el que lleva la cabeza del demonio”, la influencia de esta estrella es muy fuerte y en la mayoría de los casos desfavorable. Ambas están asociadas con notoriedad y poder económico.
El Sol, el planeta que rige del Ascendente de Trump, se encuentra muy fuerte en su Medio Cielo, lugar de la carta en donde vemos tanto la profesión del nativo como su proyección social, esa configuración es índice de éxito y brillo profesional.
El eclipse que te vio nacer, Trump
Una característica notable en su cielo de nacimiento es que el Sol está conjunto al Nodo Norte y a Urano y, en la oposición, la Luna en Sagitario. Esa oposición del Sol y la Luna muestran una Luna llena y la conjunción con los nodos nos dice que Donald Trump nació durante un eclipse. Los nacimientos bajo un eclipse constituyen un episodio fuera de lo común, por lo tanto, quienes nacen bajo esa configuración están destinados a iniciar algo, a marcar rumbos, a arrancar proyectos importantes también fuera de lo común.
Un Sol en Géminis puede reflejar a un buen comunicador, un gran vendedor con gran capacidad mental e intelectual capaz de dirigir su perspectiva a través de la palabra. Esto ya lo ha demostrado Trump a través de sus propios negocios. La conjunción con Urano puede darle una gran dosis de creatividad y originalidad y una tendencia a los cambios bruscos e inesperados a lo largo de la vida, y al mismo tiempo una gran tensión interna. Esto se ve templado por el trígono de Urano a Júpiter ubicado en su Casa II, la de las finanzas, indicando una gran dosis de creatividad en ese sentido.
La Luna en Sagitario puede reflejar en un individuo impulsivo e individualista, sin filtro para hablar. La estrecha oposición entre los dos luminares ciertamente magnifica esas características. La Luna opuesta a Urano puede crear un desafío para encontrar equilibrio y estabilidad entre esas dos fuerzas que tironean en direcciones opuestas, lo que puede causar una mayor inestabilidad y una actitud dominante.
Marte en Leo, en ajustada conjunción con su Ascendente le da características de actividad, energía, voluntad, así como también agresividad, audacia, dominio e indisciplina. Le gusta dar órdenes, ser arrogante y actuar “como un rey”.
Durante el año próximo, Donald Trump, vivirá el tránsito de Saturno en oposición a su Sol y en conjunción a su Luna que estará estacionado en ese lugar durante varios meses. Además de la responsabilidad, las obligaciones, las limitaciones , esfuerzos y retrasos que pueda significar ese tránsito, tenemos que el eclipse del Sol en el Signo de Leo del 21 de agosto se sitúa sobre su Ascendente. Esas configuraciones son fuertes indicios de que por lo menos, se avecinan para él, próximas y serias dificultades además de merma en el apoyo popular.
Fuente Entre Mujeres
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