La eterna lucha entre Liranos y Reptilianos (Historia de Stewart A. Swerdlow)

Aparentemente por la multiplicidad de razas involucradas en los experimentos genéticos de la Tierra, es que la historia de la humanidad terrestre se complica, cada quien está dejando su versión de la historia.

Según el análisis de varios textos y libros, se vislumbra que pareciera haber dos grupos raciales básicos siempre enfrentados en el mundo físico, que a su vez tienen subdivisiones: humanoides ( de la familia mamíferos, sangre caliente) y los catalogados reptiles (familia dragones, sangre fría).

Algunos teóricos piensan que la raza de reptiles fue insertada en las experimentaciones para movilizar la evolución de los humanos. Otros aducen que son los reptiles (Draco) quienes son autores de varias cepas de humanidades.

Y otro grupo cree -que en el humano de la Tierra- intervinieron 22 tipos de ADN, y que su experimentación estuvo relacionada con poner fin a los constantes conflictos bélicos que se desataron durante la Gran Guerra de Orión.

En todo caso, todas estas experimentaciones tienen que ver con el deseo de entidades multidimensionales (sin cuerpo físico) ubicadas en lo que se ha llamado la Antimateria, quienes han intentado experimentar la materia, que algunos divulgadores llaman materia bariónica (materia física). Y para lo cual requieren cuerpos o envases donde encarnar: ya sea cuerpos mamíferos o de especies más resistentes en el espacio, como son los reptiles.

 

Humanos y Reptilianos

Stewart A. Swerdlow en su libro «Blue Blood, True Blood: Conflict & Creation«, indicó que por la información que maneja (participó en proyectos secretos en Estados Unidos) se le dijo que los reptiles «fueron traídos al sistema estelar Draco hace eones por otro grupo desconocido para todos. Además, explicaron, nadie sabía nada de sus verdaderos orígenes«.

Por las explicaciones de Swerdlow, se deja ver que el ingreso de los reptiles a nuestra realidad muy probablemente estuvo relacionado con el tema de los viajes en el tiempo.

En la mayoría de las divulgaciones sobre estos temas, el grupo de razas de la estrella Sirio Alfa (A) parece tener la supremacía en materia de espiritualidad etérica y de manejo de tecnologías físicas. Y se hace alusión a que grupos de seres de esta estrella no han tenido reparos en negociar tecnologías con grupos negativos y contrarios a los humanos terrestres.

Según Swerdlow, la programación de la raza reptil tiene varios componentes: su mente fue programada para dominar y creen ser superiores en la galaxia; son andróginos (femenino y masculino en un solo cuerpo); se dividen en al menos siete castas. No evolucionan rápidamente y permanecen inalterables; su expansión también es lenta e insidiosa.

Entranto, la familia de mamíferos posee un ADN que evoluciona y cambia constantemente para sobrevivir.

 

De Lira a la Vía Láctea

En este punto, comienzan la mayoría de las narraciones obtenidas básicamente por procesos de canalización humana, donde entidades multidimensionales han ido proporcionando información a humanos para ayudar en el proceso de la ampliación de la conciencia.

Las narraciones suelen llevarnos inicialmente a la Constelación de Lyra, donde sus habitantes en un planeta llamado Avior y en la estrella Vega (planeta Apex), sufren una invasión de parte de los Draconianos (reptiles).

Momento en el que algunos grupos Liranos de origen mamífero escapan a otros puntos de la galaxia. Se dice que los que escaparon se fueron a las siguientes estrellas: Orion, Tau Ceti, Pleiades, Procyon, Antaries, Alpha Centauri, Barnard Star, Arcturus y docenas de otros sistemas solares.

Dentro de la Vía Láctea en ese momento, grupos de liranos habrían llegado al planeta Marte, que para esa época se ubicaba en la tercera órbita en relación sl Sol, mientras la Tierra habría estado en la segunda; y un planeta llamado Maldec se situaba en la cuarta órbita.

Swerdlow, dijo que estos liranos eran rubios y de ojos azules; algunos cabello rojo y ojos verdes. Añadió que la Tierra para ese momento era un mundo acuático, en segunda órbita desde el sol.

«Había poca tierra sobre la superficie. Los únicos habitantes inteligentes eran una raza anfibia que carecía por completo de tecnología. La atmósfera de la Tierra era mayoritariamente líquida. El planeta definitivamente no podría sustentar ningún tipo de forma de vida humana«.

El autor dijo que en estos planetas de la Vía Láctea se manifestaba un entorno según «los patrones mentales de cada una de las colonias«.

Dijo que en Marte y Maldec hubo climas cálidos a templados y una atmósfera rica en oxígeno (parecido a nuestra Tierra actual). No obstante, la gravedad en Maldec era más densa que en Marte, por lo que sus habitantes desarrollaron una estructura más gruesa y una actitud más agresiva.

 

Liranos forman la Federación Galáctica

Para contrarrestar los constantes ataques reptilianos, los liranos debieron formar una Alianza, la cual se llamó Federación Galáctica, compuesta por 110 colonias diferentes.

Sin embargo, tres grupos liranos no quisieron formar parte de la alianza: Los Atlans en Pléyades (este aglomerado compuesto por 32 planetas alrededor de 7 estrellas); y quienes fueron vistos «por sus primos» como renegados. Igual no hicieron alianza los Maldequianos y los Marcianos (en vía Láctea).

 

Juego de Billar en la Vía Láctea

Swerdlow dijo que los Reptiles se enfocaron en venir a la Vía Láctea, para lo cual usaron tecnología siriana, lanzando un asteroide de hielo, que por error, chocó con Maldec. Antes de explotar este planeta por la atracción gravitacional, algunos habitantes Maldequianos lograron ser rescatados y llevados a Marte.

Los restos de esta historia se ubican en el cinturón de asteroides, que se sitúa entre Marte y Júpiter.

En su paso, el cometa enviado por los reptiles dañó la atmósfera de Marte, así como a la Tierra, empujando la órbita de estos planetas, y quedando ubicado en el segundo lugar en relación con el Sol.

Se dice que este cometa se convirtió en el planeta que conocemos como Venus, y que dentro de él había seres: los reptilianos. En Venus habrían construido -posteriormente- siete ciudades.

Durante este proceso, se dice que la mayoría de los anfibios sobrevivientes en la Tierra fueron transportados a Neptuno, mientras algunos se quedaron en los océanos recién formados.

Al mismo tiempo, los reptiles situaron un objeto ahuecado cerca de la Tierra para la colonización: la Luna. Este objeto no gira sobre su propio eje; desde la Tierra siempre vemos una sola cara, mientras la otra permanece oculta.

Dentro del planeta Tierra, los reptiles tomaron un territorio que se conoció como Mu o Lemuria. (La cuenca del Pacífico, que se extendía desde Japón hasta Australia y desde la costa de California hasta Perú).

Swerdlow dijo que los reptiles trajeron animales para su sustento: los dinosaurios.

Añadió que por pedido de las razas, la Federación Galáctica realizó varios procedimientos: permitió la entrada a la Tierra de los Atlans (rechazados en las Pléyades); así como de sobrevivientes Maldequianos que habían estado conviviendo con los Marcianos en el interior de Marte.

Según estos relatos, al parecer la Tierra se llenó de renegados.

Swerdlow continúa su historia y dijo que cuando los Atlans llegaron a la Tierra ocuparon el territorio que luego se llamó la Atlántida.

«Su continente se extendía desde lo que ahora es la cuenca del Caribe hasta las Azores y las Islas Canarias, así como varias cadenas de islas pequeñas que llegaban hasta lo que ahora es la costa este de los Estados Unidos, incluido Montauk Point«.

En los procesos de supervivencia, se dijo que los Atlans se volvieron muy industriosos y necesitaron eliminar a los dinosaurios por su peligrosidad para con su raza. Tras ello, habrían comenzado los enfrentamientos con los lemurianos (raza reptil).

Paralelamente, el tercer grupo (Los Maldequianos) se ubicaban en el desierto de Gobi, el norte de la India, Sumer y otras partes de Asia.

Swerdlow dijo que los Maldequianos iniciaron una serie de ataques, donde se enfrentaron todos los grupos de la Tierra y hasta de Marte, con la intención de eliminar a las razas reptiles agresivas, lo que habría originado una verdadera guerra mundial.

Al exterior, se dijo, había guerra entre los Sirianos y los del Imperio de Orión.

Para detener un poco el desastre, se celebró un consejo en la galaxia de Andrómeda. Swerdlow dijo en un planeta llamado Hatona.

 

Un híbrido humano para calmar la guerra

El consejo buscaba crear unas reglas de juego para la convivencia pacífica en la Tierra.

Para ello se crearía una raza humana terrestre que integrara el ADN de las razas en conflicto.

Sin embargo, los reptilianos pidieron que su ADN fuera la base de este experimento, por lo que los andróginos debieron ser separados en femenino y masculino.

Swerdlow contó que este prototipo terrestre tenía en su composición ADN de 12 grupo de humanoides y uno reptiliano.

Y fue colocado en áreas de Irak-Irán, y algunas partes de Africa. También se crearon híbridos para las zonas de Lemuria y Atlantis.

El autor dijo que los híbridos de Africa fueron ensamblados por seres de un planeta artificial nómada llamado Nibiru o Marduk, quienes tienen rasgos reptiles (Annunakis).

No obstante, la creación de híbridos no habría solucionado el problema de las razas, sino que inició un enfrentamiento por el control mental de estos nuevos humanos terrestres.

Swerdlow contó que para evitar el control de los reptilianos, los Atlantes atacaron Lemuria con armas electromagnéticas, ocasionando el hundimiento de este territorio en el oceáno Pacífico.

Las únicas partes que quedaron sobre el agua son las islas de Hawái, la costa de California al oeste de la falla de San Andrés; Australia, Nueva Zelanda, las islas del Pacífico Sur, Japón, Filipinas, Taiwán y las islas del sudeste asiático.

Entonces, los sobrevivientes reptilianos fueron al norte de la India, el interior de la Tierra, el planeta Venus y partes de América Central y del Sur.

La Tierra Interna se convirtió en la «patria» para la mayoría de los Reptilianos sobrevivientes de Lemuria. Crearon las famosas ciudades del inframundo de Akkadia, Agartha, Hyperborea y Shamballa.

Swerdlow relató que posteriormente, los Atlantes fueron libres de jugar con la humanidad.

Establecieron colonias en las porciones restantes de la tierra. Invitaron a los Sirianos a venir y jugar con ellos.

Expulsaron a los seres de Nibiru del mundo y tomaron el control de «sus esclavos».

Crearon nuevos híbridos de mar y tierra, uno de los cuales se convirtió en una mezcla genética de humano y delfín.

No osbtante, los conflictos entre Atlantes (en la superficie) y los Lemurianos (subterráneos) continuaron, luego de lo cual Atlántida también se hundió.

Muchos refugiados se trasladaron a lo que ahora es Egipto, Perú, los Montes Apalaches y Europa Occidental.

El colapso hizo que la Tierra girara sobre su eje, y se originó la leyenda de El Diluvio Universal. Los grupos sobrevivientes se reorganizaron.

-Los Sirios ayudaron a crear la antigua cultura egipcia.

-Los de Tau Ceti organizaron la cultura eslava.

-Los Rigelianos estaban ocupados en China y el Oriente.

Entretanto, los reptilianos subterráneos idearon realizar un plan: mezclar su genética con la de los humanos de la superficie. Eligiendo para ello a la población de Sumeria (compuesta por refugiados marcianos, maldekianos y lyraen). Para ello se buscó a los líderes de esta civilización, y surgió el concepto de «sangre azul».

 

Expansión de las colonias

Posteriormente estos grupos se fueron expandiendo y fueron conocidos como la raza Aria.

Swerdlow dijo que en Egipto los sirios ayudaron a la formación de los fenicios, y de los hebreos.

En la India, los arios se mezclaron con los dravidianos, creando la religión hindú. En China y Japón se desarrolló un híbrido de ADN Rígel-reptiliano.

En Italia, los arturianos realizaron sus proyectos, y en Grecia: los Antarianos.

Los extraterrestres de Tau Ceti centraron su atención en el área de Europa del Este, desde lo que ahora es Serbia hasta las laderas de los Montes Urales. Influyeron en los pueblos eslavos y rusos.

En Europa central, las tribus germanas fueron manipuladas genéticamente por seres de Aldebarán.

Swerdlow sostuvo que los greco-antarianos colonizaron España y Portugal. Sus descendientes colonizaron América Central y del Sur, mezclando su genética con los indios nativos que eran de ascendencia Atlante-Procyon (mayas, aztecas e incas).

Los indios Anasazi del suroeste de Estados Unidos también fueron traídos de Procyon.

Así se fueron ubicando las diferentes razas alrededor del globo.

 

Fuente: Tomado del libro «Blue Blood, True Blood: Conflict & Creation» por Stewart A. Swerdlow

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