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La sinestesia: fusión de los sentidos

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¿Que pasaría si al oír un nombre, de pronto sientes que esa palabra te sabe a vainilla con chocochip o que al tocar una superficie, comiences a “ver” la textura suave o rugosa de lo que sientes con las manos? Conoce los misterios de la sinestesia, la fusión de los sentidos.

Cuando muchos de nosotros escuchamos la palabra sinestesia, nos puede venir a la mente la palabra anestesia, esto es natural, ya que ambas están relacionadas al acto de sentir. En el primer caso, nos referimos a aquellos que pueden utilizar más de un sentido y, en el segundo, a los que no pueden utilizar ninguno.

Hasta aquí no vemos nada extraordinario, pero imagina que “el utilizar más de un sentido” no sólo significa ver, escuchar, saborear, palpar y oler por separado, sino todo junto; por ejemplo, que los sonidos tengan un color determinado, que lo que tocas, tenga un sabor particular o que los olores tengan formas definidas. Suena como si fuera sacado de la ficción; sin embargo, es totalmente real y tiene una explicación científica.

Así que para el post de hoy, tocaremos el tema de la sinestesia para comprenderla, ver qué tipos existen, qué consecuencias trae, cómo puede cambiar nuestra vida haciéndonos ver que nuestra forma de percibir el mundo es tan personal que cambia en cada uno de nosotros, ¡vamos con la nota!

¿Qué es la sinestesia?

Empecemos por definir este fenómeno con las palabras de nuestra especialista consultada Stephany Orihuela, de la Facultad de Psicología de la Pontificia Universidad Católica del Perú quien nos explica en qué consiste:

“La sinestesia es la percepción conjunta y simultánea de diferentes sensaciones en un mismo acto perceptivo. El poder ver sonidos u oír colores, por ejemplo, son procesos que combinan dos sentidos en la percepción de un estímulo. Los sujetos son realmente capaces de describir esta experiencia intersensorial de tal manera que no sea producto de una mera asociación sino de un proceso perceptivo real”.

En mis propias palabras, yo lo llamaría la fusión de sentidos que una persona puede experimentar. Es decir, cuando un estímulo llega a nosotros, podemos percibirlo por medio de nuestros cinco sentidos en forma separada y simultáneamente; sin embargo, en este caso, se encuentran unidos de tal forma que podemos ver sonidos, saborear formas, oler colores y más.

Este fenómeno podría tener una explicación en los procesos neurológicos de nuestro cerebro. Nuestras neuronas transmiten información mediante el proceso de sinapsis, hacia el cerebro. De acuerdo a una hipótesis científica, la sinestesia es una condición primaria, que existe en todos los seres humanos, y que se va perdiendo con el paso de los años. ¿Cómo así?

Desde el nacimiento, hasta los cuatro meses de vida, en el ser humano, las conexiones del cerebro no se han ramificado en cada área de la percepción. Pero conforme vamos desarrollándonos al crecer, las conexiones neuronales  se van multiplicando por millones  y las ramificaciones nerviosas se van diversificando de acuerdo a cada área, y los sentidos de manera separada.

De este modo, estas conexiones primarias unificadas se van perdiendo entre las neuronas. Así nuestros sentidos se individualizan y cada uno tiene un efecto diferente y particular para nosotros. En personas adultas que conservan esta habilidad, esas conexiones no se habrían perdido del todo, por lo que son capaces de percibir los estímulos de esa otra manera: fusionados.

¿Qué causa la sinestesia?

Te parecerá que todo suena muy irreal y sacado de un cuento fantástico; sin embargo, la causa de estas habilidades tiene una explicación científica que ha sido estudiada por muchos especialistas reconocidos que han tratado de describir este misterio de la mente humana.

Casi todos los estudios al respecto, concuerdan que es algo que está relacionado con nuestro sistema límbico que se encarga de las respuestas de nuestro cuerpo ante el estimulo emocional, el cual tendría una relación directa con el hipotálamo, que es la glándula endocrina encargada de regular las emociones, el hambre, la temperatura, el sueño y más.

Otros estudios afirman que esto se puede deber a la trasmisión de un gen entre padres e hijos. Y esto se produciría entre sexos opuestos; es decir, el padre hereda a la hija y la madre al hijo. Otra curiosidad es que, en base a esta hipótesis, existen muchas más mujeres con sinestesia que hombres.

Esta información genética hace que desarrollemos muchas más conexiones neuronales y se produzca este exceso de sinapsis en la que nuestros sentidos se mezclan y son más sensibles  a los estímulos. Otra posible causa es que al momento de la muerte de algunas de nuestras neuronas, entre los 1 y 2 años de edad, exista un fallo en ese proceso de poda natural (diversificación neuronal) que ocurre en nosotros.

Así, las personas que nacen bajo estas circunstancias tendrán sinestesia por el resto de la vida y será algo tan normal para ellos, como para nosotros ver y escuchar por separado.

Diferentes tipos de sinestesia

Como nos cuenta nuestra entendida en el tema Stephany Orihuela:

“Los tipos de sinestesia dependen de las diferentes combinaciones de experiencias de sentidos. Una clase común de sinestesia es la de tipo grafema a color, que es la percepción de un color específico al visualizar un signo. Por ejemplo, asociar el color amarillo con el número 31 o un signo de admiración con el color rojo. Otro tipo es la de tipo música a color, muchas personas visualizan colores y formas mientras escuchan sonidos o melodías”.

Como vemos, al tener cinco sentidos diferentes que mezclar, es natural que existan diferentes tipos de sinestesia. Algunos de ellos mezclan entre dos a más sentidos por persona. Aquí les describo algunos casos que he podido encontrar y que los dejará tan sorprendidos y encantados como a mi.

Imagínate que seas capaz de escuchar el timbre de la puerta e inmediatamente,al frente tuyo, aparecen figuras abstractas que se relacionan con lo que estás escuchando. Esto es lo que les pasa a las personas que tienen estos dos sentidos relacionados, ven en un espacio físico real, la proyección de diferentes sensaciones, como si de una película se tratara.

Ahora imagina que cada vez que dices o escuchas el nombre de una persona sientes un sabor especial en la boca. El nombre de Ana se siente dulce, pero el nombre de Aroldo sabe mal. Esto es lo que les pasa a las personas que tienen estos sentidos unidos, ¿no es sorprendente?
Y si ya no sientes sabores al escuchar algo, te pasará al tocar cosas. Las texturas los remiten a un sabor diferente, todo lo que tocas tendrá algo especial. Por eso, dicen que las relaciones emocionales y físicas de los sinestésicos toda una experiencia.
En otros casos, los sinestésicos pueden desarrollar una gran capacidad memorística, ya que cada vez que hablan de números o letras los pueden “verlos” literalmente frente a ellos y memorizarlos por asociación. Los números se les ordenan ante sus ojos en fila india o formando una “L”, por ejemplo. Por otro lado, las letras pueden tener colores particulares, por ejemplo, la letra “A” será de color azul y las podrán ver de esta manera, la “B” será roja y cuando oigan hablar de  palabras como “burro” y “bueno” , estas aparecerán pintarán de colores.

Consecuencias de la sinestesia

Todo lo que te he contado tiene consecuencias en la vida diaria de estas personas, por ejemplo, al asignarle un estimulo más a lo que perciben, como en el caso de la sinestesia espacial, pueden recordar más fácilmente las cosas y desarrollar una buena memoria. Así es, por ejemplo, podrían tener mayor facilidad para aprender diferentes idiomas que tengan la misma dicción y letras.
O al momento de hacer grandes operaciones matemáticas, podrían practicar y hacerlo con mucha mayor velocidad, ya que puede visualizar la operación y mucho mejor si estos números tienen colores o atributos especiales.
Por otro lado, al ser diferentes y percibir el mundo de forma distinta, son más proclives a desarrollar capacidades como la tolerancia. Esto a su vez, les permitirá desarrollar condiciones especiales de comprensión, como la empatía, en niveles mucho más elevados que el de una persona regular.
El mundo es uno solo, pero no todos lo vemos de la misma manera. Con esto no me refiero exclusivamente a los sinestésicos, sino a la personas como nosotros que vemos y percibimos de forma particular. No solo por una cuestión física y genética, sino por la variedad de ideas y gustos que tenemos los seres humanos.
Otro punto que debemos considerar es que, como los sinestésicos son muy receptivos ante diversos estímulos, corren el riesgo de sufrir de un “exceso de información” que los podría saturar y confundir. Por ejemplo, imaginemos a un sinestésico que, cada vez que lee un libro, le asigna colores a las letras en una proyección mental indefinida  ¿Cómo será capaz de concentrarse en lo que está haciendo, con tanta información recibida?
O imagina que se trata de una persona que está aprendiendo a leer; en este caso, tendrá serios problemas para poder entender o concentrarse en la palabras y asignarles un significado, si es que logra abstraerse y desligarlo de los colores. Es así como el entorno y la forma tradicional de enseñanza no se encuentra adaptado a sus necesidades.
Si somos sinestésicos o si tenemos un familiar con estas características lo primero que habrá que hacer es entender que se es diferente. No pensar que se tiene “algo mal” o algún problema mental. Hay que acudir un especialista para saber cómo adaptarse a esta forma de ver y percibir el mundo.

Personalidades famosas con sinestesia

Algunos personajes muy reconocidos en la historia, han formado parte de este singular grupo humano, con todas las habilidades que implica ser sinestésico. Tres ejemplos de ello son el escritor Vladimir Nabokov, el poeta Charles Baudelaire y el compositor Frans Liszt.

Hasta no hace mucho, se creía que solo el 1% de la población mundial es sinestésica; esto porque, encontrarse con alguien con estas características extraordinarias que siguen sorprendiendo a la ciencia médica, era remotamente posible.

Sin embargo, Stephany nos asegura que este concepto ha cambiado:

“Nuevas investigaciones han demostrado que la sinestesia es mucho más frecuente de lo que se creía. Así pues, algunos investigadores han descubierto que es 88 veces más común de lo que se suponía. La sinestesia suele ser común entre el grupo de los artistas. Poetas como Arthur Rimbaud y Charles Baudelaire la experimentaban y a partir de ella aseguraban que su producción mejoraba y se engrandecía. En casi toda población se ha comprobado que son los artistas los que parecen experimentar con más frecuencia la sinestesia”.

 La sinestesia para la vida

Además de todo lo que te he mencionado anteriormente, debemos recordar que se pueden sacarle mucho provecho esta increíble habilidad de percibir. Por ejemplo, existen proyectos que planean utilizar algunos métodos de la sinestesia, para realizar terapias que ayuden a las personas a expresarse o a relacionarse con el entorno.

Como nos cuenta Stephany Orihuela:

Se puede afirmar que los Sinestésicos a través de este proceso, perciben la realidad de un modo diferente ya que experimentan sensaciones conjuntas que normalmente la mayoría de personas no lo haría. Lo recomendable para estas personas es que se informen sobre  este proceso y entiendan que es una experiencia posible. Para las personas que rodean a sinestésicos es importante que no cataloguen esta experiencia como anormal y mala, sino como como una vivencia diferente”.

Como se ha expresado lìneas arriba, la sinestesia está  estrechamente relacionada con el arte, ya que al tener más sensibilidad para capturar y procesar los estímulos del mundo exterior, los sinestésicos son capaces de plasmar esto la pintura, la música, la intervención de espacios, la literatura o la danza. Estamoss todo un nuevo panorama que nos permite aprender nuevas cosas, aceptar al otro en sus diferencias y comprender que el mundo no es una realidad absoluta y ciento por ciento explicada.

Fuente Soy Esotérica

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