aplausos, poco, predicciones, El Angeologo, Venezuela, Juan Carlos Ávila
Las mesas, sillas y acuerdos, tendrán que ahora pensar con profundidad cada paso que se dará en los próximos tiempos. Cambiar oro por espejos con la salvedad de que el cambio es a conciencia, se verá en las costuras y el pueblo reclamará profundamente cualquier situación. El aprendizaje está en el aire, se pondrá en práctica ante cualquier traición o cosa que se le parezca, eso incluye la inundación de productos exageradamente costosos que vendrán para la gran capital, sus negocios llevados desde el aprovechamiento y le ventajismo, se caerán por su propio peso, por supuesto, todo el mundo pensará que es imposible pero es que a partir de ahora las cosas no están a favor de aquel o de aquellos que están en contra de la verdadera solución a la situación y además, donde existe verdadera hambre desde todos los puntos de vista. Afortunadamente, el despertar llegó hace rato y las fuerzas aunque no se tengan se buscarán en el más recóndito de los lugares de cada uno de nosotros los venezolanos.
Escándalos internacionales alrededor de nuestro país nos afectará porque de alguna u otra forma, estamos inmersos o conectados con las actuaciones que la historia en menos de lo que canta un gallo tendrá que cambiar a favor de los justos, de la verdad. Los aplausos, durarán muy poco y las cortinas caerán sin misericordia, juicios y otras cosas tendrán lugar para determinar una película que se escribió y se firmó de otra forma.
En el interior del país, le durará muy poco el shock de ver cosas incomparables y con bolsillos muy cortos, tenemos derecho al cansancio como seres humanos pero también, a la recuperación de fuerzas para poner en orden nuestras vidas, la de nuestras familias pero sobre todo la vida del país y a pesar de cualquier situación las ayudas vendrán desde todos lados, disfrazadas en maletas, en lo que sea, pero el país resurgirá y tendremos tiempos en que nadie creyó que iban a llegar. Dios con nosotros.
TIPS DE PROSPERIDAD:
Un baño maravilloso para atraer la prosperidad es bañarse con una aromaterapia preparada de la siguiente manera: una hoja de laurel, hojas de menta y un palo de canela. Todo esto, activa en tu cerebro tranquilidad y paz… y así atraerás todo aquello que necesitas.
Fuente Juan Carlos Ávila / CCNoticias
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