Se dice que Robert Bauval (The Orion Mystery), un ingeniero belga aficionado a la astronomía, demostró que las tres pirámides de Gizeh son una reproducción «exacta» de las estrellas Al Nitak, Al Nilam y Mintaka del Cinturón de Orión («Las tres Marías«), y lo más importante, que esta alineación sólo pudo llevarse a cabo hacia el año 10.500 a.C.
Ricardo González del Sitio Web LegadoCosmico, escribió sobre la simbología en las pirámides de Egipto, y de viajes astrales donde en conversación con entidades superiores, se le reveló información de lo que se ha denominado en la historia como una entidad llamada RA.
«El Dador de Vida»
Dice Ricardo González en sus escritos lo siguiente:
«RAH» o «El dador de Vida», «La Fuente Primera». Lo reverenciaban los antiguos por cuanto en esta manifestación cósmica se hallaban sus orígenes. Nada más y nada menos que ante la Gran Nebulosa de Orión.
Un sector de los científicos de la Tierra, sospechan que de allí llegaron las moléculas orgánicas que hicieron posible la vida en nuestro planeta, mas me resultaba desconcertante comprobar que en Orión se pudiese venerar a este cúmulo de gas y polvo estelar. ¿Por qué?
La Gran Nebulosa de Orión o M42 es la nebulosa más estudiada del espacio.
Se constituye según los astrónomos, en un «Crisol de Creación».
Aunque en la Constelación de Orión se han hallado alrededor de veinticinco formaciones nebulosas, la M42 resulta ser el «núcleo» de este enigma que llama tanto la atención de los astrofísicos.
Hace pocos años, el telescopio espacial Hubble fue apuntado especialmente a la Gran Nebulosa por cuanto era un verdadero laboratorio para estudiar los procesos que hicieron nacer nuestro Sol y todo el Sistema Solar hace cerca de 5.000 millones de años.
Dentro de la nebulosa, el Hubble encontró un área delimitada en una figura trapezoidal (que recuerda sospechosamente las puertas incas y egipcias, las mismas que aluden puertas interdimensionales), el punto preciso donde «nacen» estrellas.
A decir de los científicos, esta «caverna estelar» tiene en formación 70.000 estrellas jóvenes y 153 brillantes discos proto-planetarios.
La Nebulosa de Orión se encuentra a 1500 años luz de distancia, y está ubicada en el centro de la región de la Espada del «Cazador de Orión».
Es tan grande, que nuestro Sistema Solar entraría en ella 20 millones de veces.
En 1997 se difundió la noticia que el propio Hubble había detectado moléculas orgánicas similares a las que dieron vida a la Tierra, y que posiblemente, debido al fenómeno de la panspermia, llegaron desde Orión a nuestro mundo hace 3.000 millones de años…
Se me explicó entonces, que de esta región del Universo proviene la materia primera que dio origen a las formas de vida que poseen apariencia humanoide.
En el Universo, el inmedible Cosmos, existen para nosotros «infinitas» manifestaciones de vida, distintas en forma y sustancia, más aquellas que tienen forma humana, procedían de «RAH»…
Es importante señalar que si bien es cierto el término «Ra», para la mayoría de los egiptólogos, alude a una entidad solar amada en el Egipto Antiguo, recientes estudios vienen echando por tierra el concepto solar en los orígenes de la misteriosa civilización de las pirámides.
Seres de dimensiones superiores le dijeron a Gonzále que la Nebulosa de Orión era un Estanque Cósmico, una fuente maravillosa de vida, como cuando un hijo ve a su madre.
«RAH es una de las manifestaciones del Universo Conciente, que crece fluyendo y reproduciéndose a sí mismo».
«Es la fuente que nos dio la vida. Pero ni siquiera nosotros podemos rastrear su origen en el tiempo, ya que es la emanación de una fuente aun más antigua, la responsable de todos estos fenómenos. No es sólo física, como viste…»
«…Sí, te estamos hablando de un misterio cósmico que conociste en la Tierra bajo la denominación de Dios«.
«Es real, de lo contrario, no estarías aquí…»