Ante las consultas de los usuarios en su canal de youtube.com, Rodrigo Romo y Andrea Barnabé (humanos instructores para el despertar espiritual), contestaron algunas inquietudes relacionadas con el mundo físico y las altas dimensiones.
Sobre el llamado cuerpo criogénico estelar que tienen varios humanos en naves espaciales, según la raza extraterrestre a la que pertenecen, Romo explicó que durante la última encarnación de la persona, se fortalece el enlace cuántico del cuerpo astral y el de dicho cuerpo criogénico, para que pueda retornar a la nave durante su «fallecimiento».
Romo dijo que por esta razón, organizaciones espirituales como Santa Esmeralda, el Comando Asthar o los sirianos, ayudan a reestablecer los códigos de ADN de la persona, a nivel astral y físico. «Se ha terminado el contrato de encarnación y hay que reintegrar el alma al cuerpo criogénico y se hace un ajuste«.
Al parecer todos estos ajustes, permitirían que los cuerpos se preparen para la fusión sin que la conciencia del cuerpo criogénico entre en un susto psicótico, pues de ocurrir, habrá que llevar a la persona a un sanatorio médico. Sería una forma de recomponer el cognitivo y reintegrarlo al criogénico.
Si este proceso se complica, sería posible que las autoridades espirituales otorguen más tiempo de vida a la persona en el mundo físico, para lograr los ajustes necesarios y lograr la fusión cognitiva.
Aclaró que la persona tiene dos cuerpos astrales, uno que es como un clon y corresponde al cuerpo físico, el cordón de plata de unión sería más denso (la longitud de este cuerpo es corta por lo que en sueños, por ejemplo, la persona no llega ni a la luna), y el cuerpo astral correspondiente al cuerpo criogénico, cuyo cordón es más sutil (y permite a la persona realizar viajes dimensionales más largos).
El segundo cuerpo astral (que denomina morontial) representaría una octava dimensión, un cuerpo de luz que ya tiene la persona, pero que debe ser activado.
Romo dijo que la persona vuelve a su lugar de origen luego del «fallecimiento» y esto de acuerdo a la frecuencia de vibración al momento de la muerte.
Para volver a sitios de luz elevada, la persona debería tener al menos un 97% de luz en sus pensamientos, hecho que sería alcanzado apenas por los llamados maestros espirituales.
La terraformación
Ante la pregunta de Barnabé sobre un nuevo planeta o Tierra, una vez superado el proceso de elevación de las almas actuales, Romo dijo que no hay una fecha precisa para esta nueva tierra, y que al menos ha sido cambiada la fecha tres veces en los últimos tiempos, para poder dar más posibilidades a la humanidad en su proceso de despertar espiritual.
Añadió que según sus fuentes, al menos se necesitan 1760 años terrestres lineales para volver a formatear la Tierra, eliminar los vestigios de la radiación y comenzar un nuevo ciclo. La nueva tierra en lugar de alinearse con la estrella Thuban (de los Dracos) lo hará con la estrella Vega, de donde provendrían las razas humanas.
No obstante, Romo señaló que este lapso de tiempo podría no ser percibido por los humanos, lo que indica que pasará muy rápido, y al despertar un día podríamos estar en la nueva realidad.
Romo y Barnabé sostienen que en el proceso de ascensión de las almas, unos irán a naves espaciales según su raza, otros se elevan a dimensiones superiores y no vuelven a este planeta, otros van al mundo intraterreno, mientras otros volverían a Tierra para su reconstrucción.
Para los que vuelven a Tierra, Romo dijo que portarán un nuevo cuerpo de sexta dimensión conteniendo los códigos en su cuerpo de la raza élfica.
Romo aseguró que es el código élfico el que pertenece a Micael de Nebadón (Libro de Urantia). (Minuto 45.10 del video adjunto).
Romo dijo también que un pleyadiano legítimo es de raza élfica.
Agregó que pese a la confusión que existe en cuanto a esta raza, existen también los elfos de piel oscura, quienes algunos habitarían actualmente en la ciudad de Agartha.
Romo relató que los elfos son la raza original que habitaba en Lemuria, y quienes fueron expulsados de la superficie del planeta durante la invasión de los reptilianos.
Habría sido en ese momento, que los Dracos trajeron la luna para esclavizar a la humanidad, conectando el divino femenino a la luna, mientras anteriormente se enlazaba con el Sol.
De igual forma, se habría producido un cambio del eje polar de la Tierra.
Romo sostiene que dos hijos Paradisíacos, Micael y Añiotak (Saraten) habrían establecido una especie de juego o tablero de Ajedrez cósmico, donde dividieron los objetivos de sus linajes o creaciones.
Mientras Micael dijo que sus hijos o fractales podían vivir la experiencia física y luego ascender, volver al origen como dioses y seguir elevándose por encima de su Padre Creador como seres crísticos; Saraten habría dicho que sus fractales habrían de adorarlo como Dios, al ascender llegarían a él, pero no podrían superarlo…
Esta especie de dualidad entre hermanos, sería según Romo, una forma de comprobar cuál modelo en la materia desarrollaba más equilibrio. «No es una pelea del bien contra el mal, sino dejar sueltas algunas situaciones…«.
Romo afirmó que el universo de Nebadón (Micael) tiene alrededor de un 45% de dualidad, mientras otros universos cercanos tienen menos porcentaje.
Consultado sobre el significado del Absoluto que aparece en varias literaturas espirituales, Romo dijo que se trata de un gran computador que filtra la experiencia, un ordenador cuántico.