Somos pequeños seres viviendo como «hijos» dentro de otro ser Gigantesco (Divulgación Alfa Centauri)

Una perspectiva importante para saber en cuál parte del universo estamos, cómo fue nuestro origen y por qué actuamos como lo hacemos en el planeta Tierra, podemos encontrarla leyendo un libro poco publicitado y que se llama «El Ser Uno» (Los Arcanos de Thoth) canalizado por Franca Rosa Canónico.

En el primer tomo de una serie de seis textos, comenzamos a vislumbrar por qué hemos escuchado la famosa frase: «Todos Somos Uno» o la Ley del Uno.

Los divulgadores de estos textos dijeron que se encuentran viviendo en la Antimateria y que vienen principalmente de la Estrella Alfa Centauri (Constelación de Orión).

 

¿Cómo es la Fuente de dónde salimos?

Señalaron que todos procedemos de un Origen que ellos llaman Principio Unico, un núcleo, un centro, una fuente que emana Vida y que ésta es Eterna. Ese centro ha sido descrito popularmente en la Tierra con el nombre de Dios.

Los de Alfa Centauri dijeron que del origen salimos y a ese origen regresamos…

Según ellos, El Uno tuvo conciencia de sí mismo y activó una máquina universal que generaba calor. Bajo la Necesidad creó la forma, el signo, la vibración, el ritmo, los colores, etcétera.

Al haber mucha creatividad dentro de sí, se vio obligado a crear un orden interno. Para ello creó un ser a su imagen y semejanza (lleno de luz) de cristales puros y diáfanos, de colores refulgentes, ritmo y vibración perfectos.

Ese ser era un Pensamiento del Uno. «El Hijo» emanado también imaginaba y creaba lo imaginado.

Dicho hijo por tanto vivía en la Mente del Uno. Es decir, el Uno creó su continuación y lo llamó Pensamiento.

Este Pensamiento tenía la obligación de ordenar, clasificar, analizar, desarrollar y comunicar todo el contenido de creatividad que emanaba del centro.

Al producirse varios Pensamientos, éstos se vieron como hermanos y a su conciencia la llamaron Vida. Esto lo unieron con el elemento Deseo y se produjo otro llamado Ritmo, después vino Vibración y ésta creó los Colores.

En su mundo, los Hijos-Pensamientos observaban pequeños y minúsculos cristales que chocaban y se fundían entre sí formando Figuras. Y luego surgieron las Formas.

El Ser-Pensamiento ordenó estos elementos según su propia Experiencia. Y surgieron así elementos útiles, pero también otros: inútiles. De forma surgió la Diversidad. Al correlacionar los datos, se originó el Conocimiento.

Cuando hubo mucha información se activó el Entendimiento. Y juntando Conocimiento y Entendimiento surgió la Recopilación y la Continuidad. De aquí surgió así la Causa y el Efecto. Y todo este compendio se llamó Sabiduría.

 

«Hijos Utiles e inútiles»

Mientras seguía el proceso de creación, los de Alfa Centauri dijeron que los elementos de menor utilidad iban siendo archivados, como desechos de la creación. Y estos fueron ocupando mucho Espacio.

Al surgir la Ignorancia, los pensamientos útiles no se imaginaron que los Inútiles algún día se rebelarían.

Así que quienes estaban más cerca de los Inútiles o Desechables comenzaron a mostrar signos de Desorden, falta de continuidad, debilidad, y lentitud, es decir se Enfermaron.

De aquí relatan los extraterrestres de Alfa Centauri, que los elementos inútiles de alguna manera corroían, oxidaban, aniquilaban, transformando lo Sutil en Denso; lo Claro en Oscuro: el Ritmo en Arritmia; Vibraciones altas en Vibraciones bajas, etcétera.

Los llamados «Utiles» no sabían qué hacer, así que trataron de realizar miles de experimentos para buscar una solución al problema.

Sus hermanos «inútiles» eran afines, pero no se debían mezclar porque no eran iguales a los otros.

De estos experimentos surgió dos bloques: Energía de resultado Positivo y Energía de Resultado Negativo.

Dijeron los de Alfa Centauri (que se hacen llamar los Ayaplianos), que los seres «Inútiles» se veían distorsionados y Feos. Así que debieron ser separados de los elementos Sanos, pues la Negatividad de los «inútiles» podía contagiar a los Sanos…

Indicaron que antes de separarse de los Elementos Distorsionados, los «Sanos» colocaron un cristal con toda la información recabada en la Pineal de sus hermanos Enfermos.

Dicho cristal les ayudaría a recordar en caso que los enfermos lograran curarse.

Al separar a los Enfermos, los de la estrella Centauri dijeron que se formó un Universo Paralelo, totalmente contrario al Primero.

De esta forma, los Pensamientos Enfermos quedaron en una zona de Oscuridad, Soledad y Perdidos, sintiéndose Abandonados, separados del Origen Creador.

Dijeron los Centurianos, que no obstante, los seres Negativos comenzaron a sentir una Fuerza en su interior. A esta Fuerza la llamaron Supervivencia. Pensaron en no desaparecer, sino en Vivir…

Los negativos comenzaron entonces a clasificar elementos e informaciones en Grados y Jerarquías.

En una palabra: todos estos elementos Negativos estaban sin la Luz del Conocimiento, sin Ritmo y sin Frecuencia. Apenas percibían colores…

No obstante, los Negativos habrían decidido continuar y Luchar, pues sabían habían perdido el Paraíso, su Cielo y su Luz.

En este punto, el relato  de los Centauri señala que los Inútiles -por azar- descubrieron que si se alimentaban de energía útil, mejorarían sus condiciones. Por ello, habrían surgido acciones como el Robo, la Maledicencia, el Engaño y la Mentira, elementos que más bien los enfermaba aún más en su condición…

 

Los Positivos protegen al Núcleo

Al parecer, los Positivos al ver estas acciones, decidieron proteger el Centro de la Creación y compactaron en bloques de energía los pensamientos Enfermos para estudiarlos posteriormente.

Los Positivo se habrían dado cuenta posteriormente que el Núcleo (la Fuente) no dejó de crear, y al concentrarse un exceso de energía, se produjo una Explosión.

En dicho instante, miles de millones de cristales incandescentes se habrían proyectado a distancias inimaginables…

Supuestamente, la explosión significó un Nacimiento, una expansión y un crecimiento.

En otras palabras, el Uno había creado su cuerpo logrando plasmarse…(como un bebé en gestación).

 

En el proceso, los pensamientos positivos y negativos salieron repelidos de igual forma, pero obtuvieron distancias diferentes en relación al núcleo.

Los que se ubicaban más cerca del núcleo comenzaron a girar alrededor de El atraídos por la fuerza gravitacional. Dicen que estos fragmentos eran diamantes muy bellos.

Los fragmentos que fueron lanzados más lejos durante la explosión: obtuvieron menos luz, y se comprimieron, densificándose, petrificándose y por tanto, sufriendo un Enfriamiento.

 

Surge el mundo de la Materia

Estos últimos crearon de esta forma: un mundo que se llamó Materia.

Dijeron los Centauri, que en esta nueva realidad resultaron amalgamados elementos útiles y los inútiles. De alguna manera, la enfermedad Negativa estaba como dormida.

No obstante, dicen los Centauri, que un día los Densificados comenzaron a ser atraídos por una Fuerza Circular Gravitacional que los impulsaba a girar en torno a un Centro. Se trataba del Creador, que los iba atrayendo…

Durante este proceso, las formas se iban redondeándo; el Uno los iría recuperando…

Los Centauri señalaron que solo uniéndose los Densificados podrían regresar a su Centro. Indicaron que bajo este precepto, surgió la Armonía. El convivir en paz y armonía lo llamaron Amor.

En las circunstancias donde se encontraban, los Centauri dijeron que los Densificados tuvieron la Necesidad de manifestarse, creando una Forma. Les tocaría entonces Plasmar lo pensado y deseado. Para ello, usaron el Signo que unidos a otros, les daría un Molde.

En el proceso de «nacimiento» del Uno, sus miles de millones de células se expandieron formando su cuerpo. Dichas células se repitieron así mismas, creadas como un Espejo: a imagen de su Creador.

Las células (cristales) se fueron aglomerando formando órganos y sistemas; y conformando el Cuerpo Universal.

De acuerdo a las descripciones de los Centauri,  los hijos-pensamientos que estaban adentro del núcleo, ahora estaban afuera girando alrededor del núcleo (tras la explosión o nacimiento «del bebé…»).

Los seres-pensamientos ubicados en la parte externa del núcleo, decidieron realizar varios viajes y exploraciones dentro de la Densidad, pero al no poder retroalimentarse del Centro o Fuente, debieron crear sus propios Hijos-Pensamientos para «alimentarse»…

En este circuito, los de Centauri indicaron que los seres en la Densidad poseen el principio creador en sus cristales internos, y por tanto, funcionan como una Mente (tienen la Mente del Creador adentro)…

Bajo el nuevo esquema, se formaron dos bloques: los seres de luz más cercanos al núcleo eran considerados Creadores de Ideas y los que estaban más lejos: se les llamaba Procreadores de Pensamientos

Los ET de Centauri apuntaron que en todo este proceso, los seres se dieron cuenta que la Realidad era Circular…y que había una realidad superior y otra inferior.

El universo circular lo dividieron en 9 partes o dimensiones. Cada una de ellas comprendía miles de millones de planos y grados.

Los seres se ubicaban así dentro de células, órganos y sistemas del cuerpo del Uno, o Principio Unico (el Origen).

Los Ayaplianos destacaron que el Uno actualmente podría decirse que ha madurado, que su nivel de Conocimiento está casi completo.

El núcleo de las células también fue conocido con el nombre de Nimeo y era considerada la partícula más pequeña.

Las células cristales por dentro tenían figuras geométricas como las Esporas.

De toda esta narración, los Centauri indicaron que los cristales forman al Uno.

Este Principio Unico primero estuvo en estado Gaseoso (elemento aire), luego se transformó en Líquido (elemento Agua) y por último en Sólido (elemento Tierra).

 

¿A qué llamamos Alma y Espíritu?

A los cristales también se le da el nombre de Energía; y a la Vida también se le dio el nombre de Alma.

Cuando los cristales se unen y son sutiles, leves, de colores claros y brillantes entonces serán llamados: Espíritus.

Si por el contrario, los cristales son Densos, oscuros, opacos y sin luz, serán llamados Materia o Energía Densa.

De esta manera, los cristales se clasifican según su Intensidad; es decir, dos fuerzas: Masculina y Femenina.

Cuando la intensidad era fuerte, colores vivos, tejido resistente e impulsos poderosos era llamada Fuerza Masculina.

Cuando por el contrario la intensidad era de cristales pequeños, delicados, colores suaves, era la Fuerza Femenina.

Continuará…

 

@red_esoterica

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