Venezolano, párate, ánimo, reflexión, Ada Addais, Wicca Reencarnada
Venezolanos, donde quiera que se encuentren, hay un sentimiento colectivo de desesperanza y desazón que debe ser contrarrestado de manera inmediata. Entendemos que el entorno no da cabida a otro sentimiento, hasta nos hemos olvidado de amar, porque lo que nos rodea no deja espacio para pensar en nosotros mismos.
Y es buen momento para volvernos más fuertes. La fortaleza no se mide en momentos gratos. El amor no se valora cuando solo amor es lo que existe. El valor no se mide en ambientes placenteros. Todos los días decimos, hablamos de la valía y de la grandeza de ser venezolano.
Ahora estamos en situaciones que hacen indiscutiblemente que lo que has dicho con tanta pasión, se ponga de manifiesto. Ahora es el tiempo para resaltar ese ímpetu y ese amor que dices tener por Venezuela.
Como lo haces? Una vez más, se te pondrán las cosas, las situaciones de tal forma que creas que no hay otra salida que corromperse y bajar la cabeza, porque cada vez será más contundente el ataque a tus valores y principios. Y es en ese punto en el que tú decidirás por ti o por tu entorno o por un momento de falso sosiego.
Aparta el tema político, porque aquí no encontraras toda tu verdad. Le has rendido culto a ideologías y has adversado ideologías, has seguido lideres y has aborrecido lideres, también has hecho todo lo que un ciudadano debe hacer por su país, pero apartando la política lo has hecho desde que óptica?. La gran mayoría de todos los venezolanos , seamos de cualquier tendencia, hemos seguido fielmente lo que dicen las personas que dirigen al país, en oficialismo o en oposición. Hacemos todo lo que nos dicen, con la gran promesa de que estaremos mejor, algunos porque volverán a como éramos antes, otros porque ahora tendrá lo que nunca tuvo antes, otros porque ahora si verán la nueva Venezuela y mientras tanto pasan los días, entre quejas, maltratos y malos ratos.
Esta no es la vida de un venezolano, esto no es una forma de vida, es una forma de muerte, donde se sigue esperando sin parar que los grupos se pongan de acuerdo y digan hacían donde vamos ahora. Ciudadano venezolano, entendemos que estamos acostumbrados a que alguien nos diga que hacer en materia de país, pero no podemos llegar al estado de letargo y desajuste reinante, porque marchaste sin sentido o porque te llevaron a un sitio a mostrar tu bajeza con agrado o porque no sabes si tus esfuerzos estan dando frutos o no.
Si te mueves en el ambiente político, asume tu rol con honestidad. Si te mueves en el ambiente económico, reinventa estrategias, inventa nuevas opciones, investiga. Si te mueves en el ambiente social, cambia esquemas y paradigmas, trabaja con el material humano que se está resquebrajando sin contemplación. Si eres el pilar de una familia, enséñales con buenos ejemplos, sin mirar lo que pudo haber sido y no fue, sintiendo que este presente, su presente es lo mejor que está ocurriendo y busca el por qué. La misión es difícil, pero si estamos aquí viviéndola es porque podemos superarla y mejorarla.
Reflexiona unos instantes que está sucediendo allá afuera, que mensaje te está llegando, que postura te están pidiendo asumir. Ahora es el tiempo, de mostrar lo que siempre has hablado de tu país, como? Una vez mas no creas en Mesías, apoya lo que consideras tu verdad y no te corrompas. No creas que pierdes o que eres un tonto, por no obtener algo por medios corruptos. Te llegaran las razones más verdaderas dentro de tu verdad para que aceptes situaciones donde no queda más salida que unirse a lo irreal. Todo está diseñado precisamente para calibrar tu sentido de ser buen venezolano.
Aunque veas gentes con poses ganadoras, con bienestar ficticio o con todo a su pies. Recuerda su realidad es mucho más oscura de lo que puedes estar pasando tu, entre tu tristeza e incertidumbre. Venezolano, no decaigas. Si hoy sientes que ya nada se puede hacer , que te han pisoteado tu dignidad, que han jugado con tus sentimientos. Párate una vez mas y sigue adelante. Reúnete con tus vecinos, reúnete con el resto del mundo y vuelve a comenzar. Es parte de tu gran plan en esta tierra divina. Lo has oído muchas veces y unas tantas lo oirás hasta que te des cuenta, donde comienza y donde termina tu labor en la sociedad. No eres veleta, no eres borrego, eres Venezolano. Tu casa , Venezuela, esta presta a servirte en la medida que tú le sirvas a ella.
Fuente Ada Addais / Wicca Reencarnada
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